A la memoria de lo que alguna vez fuimos, o lo que yo construí en mi imaginación.
OJALÁ QUE EL RECUERDO TE BASTE
Ojalá que el recuerdo te baste
cuando los brazos se alejen,
cuando la tuberculosis te reduzca a cenizas
y la obscuridad arrebate tu voz.
Ojalá que la cobardía no los mate
y que el mezquite conserve su olor.
¿Qué pasará cuando renuncies a tu sangre?
Cuando arranques las ramas de ese árbol que los une.
Cuando los hijos que no tuviste
te confinen al olvido
y te cubran de ausencia.
No cabe duda de que la casa se cae a pedazos
y los cuartos guardan el rencor de los días.
¿Qué pasará en el momento en el que olvides
las raíces que te unieron a la tierra?
Berenice Patiño Roa.
Abril 2014
OJALÁ QUE EL RECUERDO TE BASTE
Ojalá que el recuerdo te baste
cuando los brazos se alejen,
cuando la tuberculosis te reduzca a cenizas
y la obscuridad arrebate tu voz.
Ojalá que la cobardía no los mate
y que el mezquite conserve su olor.
¿Qué pasará cuando renuncies a tu sangre?
Cuando arranques las ramas de ese árbol que los une.
Cuando los hijos que no tuviste
te confinen al olvido
y te cubran de ausencia.
No cabe duda de que la casa se cae a pedazos
y los cuartos guardan el rencor de los días.
¿Qué pasará en el momento en el que olvides
las raíces que te unieron a la tierra?
Berenice Patiño Roa.
Abril 2014
Comentarios
Publicar un comentario